«…Me iba a costar encontrar el camino. Se me iban a desdibujar de la vista los horizontes y a nublar algunos cielos.
-Elisa, querida, te voy a enseñar a hacer pompones de los de coronar gorros y adornar bufandas. Mira, se hace así.
Y la abuela me explica que se cogen dos cartones redondos en los que se hace un agujero central por el que se pasa la lana hasta que tiene un grueso determinado. Después se junta un manojo enrollando un hilo y se corta la lana entre los dos cartones. Como por milagro, aparece una bolita peluda tras el proceso.»
¡Lola Roig y yo hemos vuelto a trabajar en equipo!
El fragmento y la ilustración son del relato «Corazón Negro» con el que hemos participado en el concurso «Arroz Negro» de este año.